A día 15 de Marzo de 2024 presentamos el testimonio de Mauro Ortega:
» En un lugar lejano en tierras dominicanas,
Me adentré en un viaje que cambió mis mañanas.
El poder de dar, entendí en cada sonrisa,
Y en cada gesto, una lección precisa.
Desde el instante en que pisé el suelo,
Envuelto en un abrazo, sentí un anhelo.
Lejos de mi casa, pero cerca del corazón,
Cada abrazo y mano tendida, una bendición.
Ahora te preguntas, si vale la pena intentarlo,
Si el voluntariado puede en verdad cambiarlo.
Te aseguro, con cada sonrisa, una verdad,
Cada momento compartido, una nueva realidad.
Si alguna vez consideras dar un paso igual,
Recuerda, no sólo cambiarás, sino que crecerás.
En Sabana Yegua aprendí con certeza,
Que compartir es el acto de mayor nobleza. «